jueves, 11 de marzo de 2010

Consejo para Padres y Educadores

La mejor manera de prevenir situaciones de riesgo y ayudar a nuestros hijos y alumnos a navegar con seguridad es:

  • Hacerlos conscientes de los beneficios y riesgos de Internet.
  • Educarlos para que sepan navegar de manera responsable.
  • Proporcionarles estrategias para que puedan protegerse ellos mismos y ellas mismas mientras navegan.

Por eso a continuación les ofrecemos algunos consejos prácticos muy sencillos que les pueden ser muy útiles. Les recomendamos que hablar con los menores y adolescentes.

Familiarizarse con Internet:

Para poder ayudar a nuestros hijos y alumnos a navegar por Internet de manera segura, es mejor que conozcamos este nuevo invento. No hay que entenderlo ni que seamos expertos, basta con intentar navegar un poco. Incluso, si ellos saben más que nosotros podemos pedirles que nos enseñen a manejarlo.

Además de conocer un poco Internet, para ayudar a los menores a navegar de manera gratificante, vale la pena que seamos conscientes de los beneficios y riesgos de la red.

  • Posibles riesgos en Internet
    En Internet hay determinadas actividades que pueden ser adecuadas para los adultos, pero no para los niños. Podemos clasificarlas según se refieran a contenido, contacto, comercio electrónico o delitos.

    Otra forma de aproximarnos a los posibles riesgos de la red es en función del tipo de servicio: web, blog, correo electrónico, mensajería instantánea, chat...
    Además, como Internet es multimedia, los riesgos pueden presentarse en forma de texto, imagen, sonido o animación, cosa que significa que el contenido inmoral o amoral puede llegar a ser mucho más explícito y sorprendente en Internet que en otros medios.

    A pesar de que los aspectos beneficiosos de Internet pesan mucho más que los negativos, no podemos ignorar estos riesgos, pues se trata de cuestiones importantes de interés público, político, comercial y jurídico.
    De ahí la importancia de enseñar a nuestros hijos y alumnos cuales son los posibles peligros del ciberespacio y darles unos consejos prácticos para que naveguen con cuidado y sepan protegerse ante situaciones potencialmente arriesgadas.

    También podemos informarnos y considerar la posibilidad de utilizar instrumentos de control, es decir, mecanismos técnicos que permiten filtrar y bloquear los contenidos de manera que podamos decidir cuáles son los contenidos de Internet a los que nuestros hijos y adolescentes pueden acceder y a cuáles no.

    Beneficios de Internet

    Se ha calificado Internet como el invento más influyente desde que se inventó la imprenta.

    Este invento sirve básicamente para:
  • compartir información
  • intercambiar ideas y opiniones
  • comunicarnos con el resto

    Internet puede ayudar a los niños a:
  • Encontrar recursos educativos, incluidas noticias y actualidad informativa, obtener documentos y fotos, e investigar sobre temas muy variados, desde las condiciones climáticas hasta las estadísticas de población.
  • Conseguir ayuda para hacer las tareas escolares, ya sea mediante las enciclopedias en línea y otras obras de referencia, o bien contactando con los expertos.
  • Aumentar las habilidades de lectura accediendo a contenidos interesantes, que pueden sugerir la lectura adicional.
  • Aprender a utilizar mejor las nuevas tecnologías y mejorar las habilidades informativas, para saber encontrar y usar información deseada, resolver problemas, comunicarse con el resto y, en definitiva, adquirir aquellas habilidades que cada vez son más solicitadas en el mercado laboral.

    Según el servicio de Internet que utilicemos podemos destacar diferentes beneficios:

    Páginas web
  • Acceder a recursos educativos y culturales (texto, sonido, imágenes y vídeo) que de otra manera estarían fuera del alcance de muchas personas
  • Obtener información actualizada.
  • Mejorar la capacidad de comprender y evaluar la información.
  • Estar informado y poder acceder a los sitios web de las instituciones y de las escuelas.
  • Jugar a juegos divertidos y educativos.
  • Adquirir habilidades educativas útiles para el futuro laboral.


    Correo electrónico
  • Comunicarnos fácilmente y en cualquier momento con nuestros amigos y familia.
  • Se pueden enviar fotos, mensajes de audio, y reenviar documentos y otras cosas que se hayan encontrado en línea.
  • Se puede enviar un mismo mensaje a mucha gente al mismo tiempo solamente añadiéndolos a la lista de correo.
  • Para algunas familias es una forma útil de asegurarse que sus hijos les escuchan cuando les dicen algo, porque no pueden interrumpirles. Siempre que se escribe un mensaje de correo electrónico es porque se tiene ganas y se está en disposición de "hablar" (no pasa eso cuando por ejemplo cuando se recibe una llamada telefónica).

    Chat
  • Desarrollar relaciones con otros niños y adultos de todas partes del mundo.
  • Hablar con niños que tengan intereses y preocupaciones similares, en canales específicos para menores y adolescentes que están moderados adecuadamente por adultos.
  • Comunicarse de manera instantánea con la familia, amigos, personal docente, las instituciones, etc.

Mensajería instantánea

  • Comunicarse con su grupo de amigos o contactos.
  • Intercambiar archivos y fotografías fácilmente.
  • Trabajar colaborativamente en red. En estos momentos los chicos utilizan este medio para comentar y no hacer solos los deberes escolares.

    Blogs
  • Expresarse en el nuevo lenguaje multimedia.
  • Contactar con otros chicos y chicas que piensan o les gusta lo mismo que a ellos.
  • Compartir opiniones sobre los temas que les interesan.
  • Responsabilizarse, adquirir el compromiso de actualizar los contenidos publicados.

    Juegos en línea
  • Divertirse.
  • Mejorar la habilidad de coordinación viso manual.
  • Desarrollar la capacidad de respuesta y toma de decisiones.
  • Poner a prueba las capacidades de ingenio y estrategia.

Hablar abiertamente con los menores y adolescentes sobre el uso de Internet
Interesarse por lo que nuestros menores y adolescentes hacen con el ordenador, tanto en casa como en el colegio, en la biblioteca pública, en casa de los amigos.... nos ayudará a estar alerta de los posibles riesgos y a construir una atmósfera de confianza.

Es necesario mantener una buena comunicación con nuestros alumnos o nuestros hijos e intentar que nos informen siempre que vean algo que no les guste o les haga sentir incómodos. También es importante que se acostumbren a presentarnos a las amistades que mantienen por la red.

Si nuestros alumnos o nuestros hijos nos explican que se han encontrado con algún internauta o con algo que les ha molestado, o se han saltado las reglas, es mejor no culparlos sino ayudarlos a evitar problemas en el futuro. Hay que recordar que según cómo reaccionemos, los niños nos tendrán o no bastante confianza y recurrirán a nosotros la próxima vez que se encuentren con algún problema.
Nuestra mejor estrategia es trabajar con ellos, de manera que pueda aprender de lo que ha pasado, adquirir unos hábitos de seguridad, y saber cómo protegerse por sí mismos. Establecer una atmósfera de confianza por lo que se refiere al uso de la red, nos ayudará a prevenir situaciones de riesgo.

Navegar juntos
Otro buen método de prevención contra los posibles riesgos de Internet, especialmente con los más pequeños, puede ser acostumbrarnos a navegar juntos con los niños y hacer de Internet una actividad lúdica y familiar. Los Computadores pueden ofrecer uno de los mejores y divertidos viajes que grandes y pequeños podemos compartir. Mientras nos conectamos juntos, no debemos preocuparnos si vemos que los menores tienen más facilidad para usar el computador que nosotros. Podemos dejarlos que dirijan las sesiones, pedirles que nos enseñen, hacer todas las preguntas necesarias; eso puede ser de gran ayuda para su autoestima.
Al mismo tiempo, nosotros podemos enseñarles a navegar de forma segura y facilitarles los recursos para que sepan utilizar Internet responsablemente. Por ejemplo, podemos comentar con ellos la diferencia entre publicidad y contenido educativo o de ocio y mostrarles ejemplos de cada cosa.

Informarse sobre los instrumentos de control
Existen varios programas informáticos que permiten a los adultos controlar el uso que los menores hacen de Internet. Los instrumentos más habituales son los filtros, que limitan el acceso a contenidos nocivos. Es importante que familias y educadores conozcamos la existencia de estos instrumentos de control para que podamos considerar libremente la posibilidad de instalar alguno en el ordenador de casa o de la escuela.

En el caso de decidirnos a utilizar algún tipo de control técnico, debemos ser conscientes de que son una herramienta de ayuda importante pero no reemplazan la educación que debemos dar a nuestros hijos y la relación de confianza que debemos fortalecer con ellos, por lo tanto, deberemos continuar interesándonos por la navegación de nuestros niños y adolescentes y como ellos se relacionan en Internet

Preguntar en el colegio qué política de seguridad siguen
Sería interesante informarnos sobre qué medidas de prevención de accesos a contenidos nocivos de Internet están tomando los colegios y las bibliotecas dónde van nuestros niños. Podemos hablar del tema con otros padres y madres que conozcamos y contribuir, tanto como podamos, a sensibilizar a las personas implicadas sobre la utilización segura de Internet. Entre todos podremos decidir la mejor manera de proteger nuestros niños.

Establecer reglas básicas de seguridad en el hogar y en el colegio
Debemos decidir con los niños y adolescentes unas reglas de seguridad para el uso de Internet. Estas normas sirven sencillamente para que los más jóvenes lo puedan pasar bien y estar seguros mientras navegan.
Podemos acordar con los menores los lugares web para visitar, el horario de conexión más apropiado, etc.
A fin de que las reglas sean más efectivas, deberán ser fruto de la comunicación con ellos, de un acuerdo. Podemos colgarlas en un lugar visible y respetarlas todos por igual.


Colocar el ordenador a la vista de todos
Para estar cerca de nuestros niños mientras navegan, mejor si colocamos el ordenador de casa en una sala común, a la vista de todo el mundo, no en la habitación de los niños (como mínimo mientras no son adolescentes). Esto nos ayudará a dar un vistazo más a menudo a lo que hacen en Internet.

Enseñar a los menores a navegar con seguridad
Para los menores Internet es un lugar genial donde se puede hablar con gente de todas partes y hacer nuevos amigos y amigas, aprender cosas sobre cualquier tema, y pasárselo a las mil maravillas. Pero valdría la pena que para su seguridad llegaran a:

  • Ser conscientes de que el ordenador es una herramienta educativa que sirve para comunicarse de manera positiva.
  • Saber distinguir entre los contenidos de Internet que son recomendables y los que no lo son.
  • Ser conscientes de que en Internet hay gente de toda clase, como en cualquier otro lugar.
  • Saber reaccionar de manera responsable y saber resolver por sí mismos posibles situaciones de riesgo.


Por eso es conveniente que enseñemos a nuestros hijos y alumnos a seguir estos consejos prácticos:

  • No facilitar nunca los datos personales (el nombre completo, la dirección, el teléfono) ni su contraseña a nadie por Internet.
  • Que nos presenten a sus “ciberamigos”, del mismo modo que nos presentan a los otros amigos. Y si quieren quedar con alguien que hayan conocido a través de Internet, sugerirles que los acompañe una persona adulta y que se encuentren en un lugar público.
  • Si hay algo que les resulta desagradable, que lo digan a algún amigo o adulto y que no dejen que les perjudique.
  • Si quieren comprar o hacer algo por Internet que pueda costar dinero a su familia, mejor que lo hagan siempre con el permiso y la ayuda de los padres.


Buscar lugares web seguros

Específicamente para los más pequeños, sería necesario buscar lugares web seguros, dirigidos a ellos, del mismo modo que buscamos libros, programas de TV o películas que les son apropiados.

Ante un posible problema, reaccionar a tiempo

Si en alguna ocasión tenemos indicios de que nuestros niños o alumnado están en riesgo, podemos hablar con ellos y llamar a la policía o algún otro organismo adecuado.
En caso de encontrar pornografía infantil, material presuntamente ilegal o cualquier otro que consideréis que puede herir la sensibilidad de los niños o adolescentes, podemos ponernos en contacto con la policía.
También podéis denunciarlo anónimamente a http://www.protegeles.com/